SantoSha

SANTOSHA  es uno de los Niyamas (prácticas de conducta personal) descrito tanto en los Yoga Sutras de Patanjali, donde menciona cinco niyamas; como el Hatha Yoga Pradipika donde Swami Svatmarama describe diez niyamas. 

Los niyamas son prácticas de conducta, una forma de aplicar los códigos éticos del yoga al cuerpo, a la mente y al espíritu del practicante, lo que ayuda a crear un clima interno adecuado para disminuir los obstáculos en el camino de crecimiento personal. La  conciencia y práctica de los niyamas otorga al Sadhaka (practicante) la fuerza interior, limpieza, claridad y disciplina que necesita para progresar en su viaje espiritual.

Santosha, proviene de SAM (que significa completamente) y TOSHA (que significa contentamiento o aceptación). Se traduce como estar satisfecho, contento, alegre con lo que hay y tenemos: “completa aceptación”. Esa aceptación se proyecta a todo lo que somos y todo lo que tenemos, en todo momento de nuestra vida; pero no hay que confundir con conformismo, ya que éste último implica resignarnos o soportar aquello aunque no nos guste, y lleva implícito cierta apatía, enfado o resentimiento por el resultado no deseado. Santosha  es pro-activo y lleva implícito la auto-responsabilidad de accionar en función de lo que sentimos oportuno para nuestro SER, una acción coherente. Está relacionado con la satisfacción de estar en el camino o en el Dharma personal.

Santosha es una práctica en diferentes niveles:

· Sankalpa: poniendo la mejor de las intenciones y enfoque de energía en la acción.

· Interno: la actitud de contentamiento te expande a otras virtudes como la compasión, empatía, el desapego al resultado de la acción y a la abundancia.

· Externo: la manifestación externa te permite andar con alegría, serenidad, sentir con autenticidad y movernos desde la total satisfacción.

El Yogui acepta las situaciones que se presentan, ya sea placer, dolor, fracaso o éxito. Experimenta, siente y trasciende… no hay apego a esa situación. No se trata de no sentir, se trata de atravesar conscientemente lo vivido desde la plena fe de que, tarde o temprano, deviene un aprendizaje; que  con perspectiva se verá la transformación y evolución gracias a esa situación vivida. 

Para el Sadhaka, la felicidad no depende de alcanzar objetivos o cambiar aspectos de uno. Santosha implica aceptarse a uno mismo y aceptar la situación en la que uno se encuentra, en tanto me acepto y vivo la experiencia, la transformación ocurre. Somos nosotros los que le otorgamos verdadero valor a lo que nos toca vivir. Aunque las circunstancias se vuelvan adversas, tú estarás en tu centro. Con Santosha deviene un sentimiento de entrega y confianza en la vida. Comprendiendo que hay cosas que sí están en nuestras manos y otras que trascienden nuestra gestión. 

Con la auto-observación se desvanecen las influencias externas, se puede estar en el estado más puro de uno mismo, consciente de los  miedos e introyectos. Esto se considera una parte esencial del desarrollo espiritual. Y para ello Svadhyaya (estudio de uno mismo) es la brújula de nuestro Yo verdadero. 

Santosha es celebrar que la vida provee lo necesario para sostener nuestro SER, aunque, claramente nunca podrá satisfacer las expectativas del ego. Santosha es la capacidad de agradecer la vida, sólo por la mera virtud de ser, es una actitud y un estado.

Santosha en la esterilla de yoga

A veces nos cuesta aceptar que no podemos hacer la postura (asana)  que queremos hacer. Estar satisfechos con donde nos encontramos, lo que sí hemos logrado y avanzar desde ahí es la clave para una práctica sana de yoga que genere una transformación real y profunda.  

En Hatha Yoga, ASANA quiere decir una forma de estar y sentirse a uno mismo en cada postura y en cada momento de la práctica. Requiere responsabilidad de cada uno de ajustar la práctica a sus características y a su momento vital, no quieras ir más allá del límite.

Cuando estés practicando sobre la esterilla, obsérvate con una mirada benevolente, inocente y alegre como la de un niño, desde ahí, apreciarte por lo que eres y por lo que sí puedes hacer,  siente respeto a las historias que llevas grabadas en tus células, siente gratitud a lo maravilloso que es  tu cuerpo y al punto al que has llegado. Cuando sueltas la idea de tener que ser más flexible o más fuerte, entonces esa energía fluye a tu favor, fruto del Santosha.

Encuentra satisfacción en cada práctica, experimenta gratitud por los beneficios que vas obteniendo y siéntete privilegiado por tener la oportunidad de practicar Yoga con alegría.